Si hay una cosa en esta vida que me apasiona es por supuesto el cine. Gracias al cine he podido superar y afrontar multitud de problemas que se me han presantado en la vida. Y todo ello se lo debo a mi madre que fue la que me enseñó a valorar, respetar, comprender y por encima de todo a amar este arte.
Disfrutar de una buena película en compañía de mi pareja es de lo más bonito que tengo. Además, si mi pareja comprende, respeta y valora mis aficiones entonces ya no puedo pedir más. Como dice mi pareja el cine no ha sido la válvula de escape de mi vida sino que es en cierta medida uno de mis ejes vertebradores.
Hace tiempo ví en el blog de mi buen amigo Iñaki, un madelman custom que hizo y a mí se me encendió la lucecita y le pedí que me hiciera uno inspirado en un personaje que aparece en una magnífica película llamada La esclava libre (Bad of Angels, 1957). Se trataba de Rau-Ru. Sí, personaje que encarnó en este melodrama racial ambientado en plena Guerra de Secesión americana y de carácter antiracista, el siempre elegante en portes y modales Sidney Portiers.
Este tipo de película, llamadas melodramas, y en concreto los que se hicieron en los años 50 y 60 me apasionan porque son un continúo reflejo de la sociedad americana o mejor dicho son un reflejo de los valores adquiridos o perdidos en esa sociedad en aquellos momentos y en los que sus protagonistas, el ser humano lucha contra sí mismo o contra los que les rodean por cambiar un orden social que no entiende y le han impuesto o por el contrario, como otros luchan por mantener ese orden a pesar de no practicarlo, pero con el fin de obtener beneficios del mismo. Ejemplos de esos melodramas son: Con él llegó el escándalo, Susan Slade, Parrish, En una isla tranquila al sur, Imitación a la vida, El tercer día, Los Insaciables, La gata sobre el tejado de zinc ... y así un largo etc. Mi pareja no entiende porque me gustan tanto y además como dice cuanto más atormentados, cuando la atmósfera de la historia es más afixiante y tormentosa más me gustan, jjj y es verdad, tiene razón. Me gustan porque reflejan unos valores e ideas y unas situaciones que por mucho que avancemos se siguen repitiendo pero con distintas ropas o con distinto nombre como pueden ser dramas sociales.
Además de estos melodramas hay otros que también me apasionan y son los que están centrados en plena Guerra de Secesión americana como es el caso de este film, en el que cuenta la historia de Amantha Starr (la bellísima Yvonne de Carlo) hija de un ricachón del sur y de una esclava negra, la cual descubre sus orígenes el día de la muerte de su padre ya que físicamente es blanca, pero al morir su padre vienen los acredores para hacerse dueños de la plantación y de las personas que trabajan a su cargo y entre ellos por supuesto está Amantha. La cual es vendida en subasta al siempre elegante y valeroso Hamish Bond (interpretado por Clark Gable) y gracias al él aprenderá una serie de valores y se dará cuenta de muchas cosas de las cuales antes no era consciente. Este film, para mí es magnífico pues de forma muy breve cuenta una historia que a día de hoy no está pasanda de moda por desgracia. Por supuesto, hay otro film que además comparten protagonista y es la obra maestra en todos los aspectos tanto interpretativos como técnicos conocido como Lo que el viento se llevó melodramón donde los haya y que recomiendo ver una vez al año, por lo menos los que nos apasionan este tipo de películas,jjj.
Volviendo a mi Rau-Ru, se lo encargué hacer a Iñaki porque me acordé mucho de este film La escalva libre y porque para Sidney Potiers es un actor que me apasiona por sus modales, por su elegancia interpretativa, por su saber estar,... etc. Ha sido un actor de muchos films como: La esclava libre, Fugitivos, Adivina quien viene esta noche, Semillas de maldad, En el calor de la noche, Porgy and Bess, ... etc. Pero si hay una película de Potiers que destaco por encima de todas es Rebelión en las aulas (1966), donde interpreta el papel de un ingeniero en paro que acepta en puesto de profesor de un instituto en la periferia de Londres a cargo de un grupo de alumnos bastante conflictivos por carecer de modelos de referencia y que él les ayudará y les dará la oportunidad de conocerse, valorarse y respetarse. Toda esta elegancia, portes, ... etc de la que destaco de él es en el fondo lo que les muestra día a día a los chavales, los cuales irán viendo un nuevo modelo hasta entonces desconocido y les ayudará bastante. Además al ser un film muy idealista, el profesor Thackeray descubrirá su auténtica vocación: enseñar a ser personas.
Voy a dejaros una imagen del cartel de esta magnífica película y de una de sus canciones interpretada por la magnífica Lulú, que también tiene un papel en este film.
Y ya por fin, os voy a mostrar a mi Rau-Ru. Customización del madelman negro hecha por mi amigo Iñaki.
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